Bajaban con el sol

Bajaban con el sol por la calle San José. Venían en pandilla. De tenerlos encerrados, salieron de misa con el demonio dentro y los bolsillos llenos de piedras. Ya habían matado un gato y tirado dos nidos cuando Manuel, El Choto, dijo “Vamos a tirarle piedras a la Luna”. Así llamaban al chico de la Valentina: Chico Luna. Era blanco, blando, gordo, torpe. Era bobo. De la comisura de sus labios, casi siempre, caía una baba; y le gustaba esperar a las sombras en la fresca sentado tristemente.

Bajaban con el sol por la calle San José dando gritos y tirando piedras: “¿Te duele Chico Luna? ¿te duele, tonto?”. Y el pobre bruto, aterrorizado, con cada piedra que le caía, se tapaba la cabeza y gritaba: “¡No sé!”

“¡no sé!”